Instinto y olfato son dos de las principales cualidades de los perros de las que se aprovecha el ser humano. De esta forma, no solo es su mejor amigo, sino el más eficiente y capacitado para un sinfín de labores.
Los perros están en el top del ranking de la mejor mascota por su indiscutible fidelidad, nobleza, inteligencia, aptitudes y muchos talentos que los acercan a las personas para darles compañía y servir tanto en su hogar como en otros ambientes donde se desenvuelvan.
Es larga la lista de oficios, trabajos y profesiones que puede desempeñar un perro. Existen perros de terapia, de servicio, de pastoreo, de compañía, de asistencia emocional y hasta de detección de enfermedades, todas funciones increíbles que requieren de adiestramiento y dedicación, tanto del dueño como del animal.
Pero en este artículo nos vamos a referir a los perros policía, esa noble profesión que está asociada a riesgos, adrenalina y, especialmente, a mucha intuición y entrenamiento para poder alcanzar los objetivos del cuerpo policial y lograr las tareas que le asignen al can.
Los perros policía son adiestrados para cumplir varias labores, específicamente en el área de la seguridad pública, de investigación policial y de protección ciudadana, y donde la subdivisión de faenas es tan extensa que prácticamente podemos hablar de perros expertos y especialistas en uno o varios oficios relacionados con el trabajo policial.
¿Cuáles son las mejores razas de perros policías?
En este aspecto del tema, existen muchas opiniones que se han generado en torno a las razas de perros que mejor funcionan para los cuerpos policiales, especialmente porque existen muchos trabajos que los perros policías pueden hacer, cuya clasificación ha sido realizada por expertos veterinarios, entrenadores y conocedores del comportamiento y de las características de cada casta. Aunque la clave está en el carácter del animal.
Por ejemplo:
- Los perros policía por excelencia son de las razas Pastor Alemán, Rottweiler, Pastor Belga, Pastor Holandés y el Labrador Retriever.
- Para el control del orden público las razas más entrenadas son Doberman, Rottweiler, Boxer, Schnauzer y las mencionadas anteriormente.
- Si la tarea es de búsqueda de cadáveres, los mejores para llevarla a cabo son Bloodhound, Pastor Belga y Beagle.
- Si van a ser entrenados como perros de rastreo, cualquiera de las razas mencionadas son eficientes para esta labor, y si se trata de asignarles la detección de sustancias ilícitas, explosivos o billetes falsos, las razas más utilizadas son Cocker Spaniel, Foxhound, Weimaraner, Springer Spaniel Inglés, Schnauzer, Golden Retriever, Pastor Belga, Pastor Alemán, etc.
Realmente, la utilidad que puede tener un perro policía se puede clasificar en grupos específicos:
- Los perros detectores, que pueden identificar por medio del olfato la existencia de explosivos, sustancias químicas o narcóticas, minas, animales extraños, etc.
- Los perros de salvamento también tienen una función especial en los cuerpos de seguridad, especialmente cuando existen catástrofes naturales como deslizamientos de tierra, derrumbamientos de edificios, aludes de tierra, avalanchas, terremotos, tsunamis, etc.
- También están los perros llamados de intervención, que pueden participar en protección ciudadana, en disturbios, búsqueda y persecución de antisociales y rescate de rehenes.
Los mejores perros policia son juguetones, fuertes y activos
Ya mencionamos que la clave de un buen perro policía es el carácter, pues dependiendo de este, su entrenamiento y desempeño serán más o menos efectivos. Pero existe otra característica esencial, como es el gusto por el juego, pues este es la base principal de su entrenamiento, y físicamente debe ser fuerte y activo.
Asimismo, es importante que tenga desarrollado su instinto de caza, ya que varias de las funciones que desempeñarán serán seguir rastros, perseguir y atacar.
¿Cómo entrenar a un perro policía?
El entrenamiento y capacitación de los perros policías es duro y comienza desde que son cachorritos de unos ocho o nueve meses, y se extiende durante aproximadamente un año continuo con la idea de que logren asimilar las tareas fundamentales para los cuerpos policiales y de seguridad del Estado.
Este entrenamiento está realizado hecho por profesionales y requiere de varias etapas que incluyen desde el adiestramiento básico en obediencia hasta las más concretas con el que pueden llegar a realizar verdaderas proezas.
Los perros policía son de tamaño mediano, ágiles, con competencias para la adaptación y el aprendizaje para que puedan asimilar aptitudes como defensa y ataque, pues cualquier perro entrenado para estas labores debe tener capacidad para servir desde vigilantes hasta para atacar a un agresor e inmovilizarlo.
Los ejercicios para entrenar a los perros policías en estas dos tareas se enfocan en enseñarles dónde y cómo morder a una persona sin causarle daño mortal.
Otra tarea que debe cumplir un perro policía es la de socialización, para que en la medida en que se familiarice con el entorno obedezca a las órdenes más elementales. En este entrenamiento el perro ya da muestras de su capacidad para pertenecer o no a un cuerpo policial.
Después de un año de entrenamiento en obediencia y socialización, viene la etapa del entrenamiento individual con su instructor, quien velará por su acondicionamiento físico y psicológico.
El entrenamiento físico de un perro policía es altamente exigente, para lo cual se requieren de espacios apropiados donde el animal pueda correr a gran velocidad, saltar, superar o sortear obstáculos, reptar dentro de túneles, subir pendientes, atravesar aros, escalar peldaños y otra serie de ejercicios que lo harán competente para desplazarse en terrenos de condiciones extremas (resbaladizos, con huecos, piedras, escombros, etc.), entre la muchedumbre o a grandes alturas.
A los perros policía se les entrena para ser obedientes a la más pequeña señal de su compañero.
La instrucción comienza en lo más básico como lanzarles una pelota para que la traigan al entrenador, e ir avanzando en las órdenes básicas para que hagan su trabajo, incluso bajo condiciones de estrés o de peligro. La obediencia es el factor esencial para que el trabajo del perro sea eficiente.
Otros entrenamientos específicos están relacionados con las características del perro, y en el caso de entrenar a un perro policía, dependiendo del campo en el que se desenvolverá, el adiestramiento estará relacionado con el desarrollo de la intuición o del olfato, en caso de que se le asigne la tarea de detectar explosivos, sustancias tóxicas, seguir rastros de personas desaparecidas, perseguir delincuentes, detectar cadáveres, detectar personas en escombros, lodo, nieve, etc.
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